No Faltes a Tu Iglesia
đź“– “Busquemos la manera de ayudarnos unos a otros a tener más amor y a hacer el bien. No dejemos de asistir a nuestras reuniones, como hacen algunos, sino animĂ©monos unos a otros; y tanto más cuanto que vemos que el dĂa del Señor se acerca. Porque si seguimos pecando intencionalmente despuĂ©s de haber conocido la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados; solamente nos queda la terrible amenaza del juicio y del fuego ardiente que destruirá a los enemigos de Dios.” Hebreos‬ â€10‬:â€24‬-â€27‬ â€DHHDK‬‬
Reflexión 🤔 La ausencia de los creyentes, o inconstancia para asistir a sus reuniones de iglesia, produce un contagioso desaliento, que se extiende fácilmente entre todos los demás miembros.
Todos tuvimos un “Primer amor” cuando nos convertimos al escuchar las hermosas y buenas noticias del evangelio; sin embargo las preocupaciones de este mundo y el descuido espiritual, pueden hacer que el corazĂłn de algunos creyentes se enfrĂe, y solo les quede el recuerdo de los buenos tiempos de pasiĂłn por Dios. Jesucristo nos dice: “Tengo esto en tu contra: has dejado a un lado el amor que tenĂas al comienzo. AsĂ que recuerda dĂłnde estabas antes de caer. Cambia y haz lo que hacĂas al principio. Si no cambias, vendrĂ© a ti y quitarĂ© tu candelabro de su lugar.” â€â€Apocalipsis‬ â€2:4-5‬ â€PDT‬‬
“Jonatán le dijo a David: —Mañana es la fiesta de luna nueva. Cuando vean tu asiento desocupado, te van a extrañar.” â€â€1 Samuel‬ â€20:18‬ â€NVI‬‬
Y es que un asiento vacĂo en la iglesia, habla con mucha elocuencia. A pesar de que su mensaje no es agradable, todos lo pueden oĂr y sentir.
-Al que predica, los asientos vacĂos le dicen: “Tu sermĂłn no les interesa.”
-Al que sĂ asiste a la iglesia, los asientos vacĂos le advierten: “Estamos perdiendo terreno.”
-Al nuevo convertido que busca una iglesia donde asistir, le dicen: “Observa y espera a ver lo que pasa aquĂ.”
-A quienes administran las finanzas de la iglesia le dicen: “¡Cuidado! Habrá ofrendas insuficientes para los gastos”
-A los miembros presentes, los asientos vacĂos los invitan diciĂ©ndoles: “Si quieren, ustedes tambiĂ©n pueden faltar el domingo prĂłximo, al cabo muchos lo hacen.”
Pero a los verdaderos miembros comprometidos, les apremia diciĂ©ndoles: “Urge trabajar con más pasiĂłn, Invitar a otras personas a la iglesia, avĂvarnos, orar más, ponerle más entusiasmo y compromiso, y esforzarnos para llenar con nuevos invitados, todos esos asientos vacĂos.”
Los asientos vacĂos desalientan los cultos. Entristecen a cada miembro del Ministerio de Alabanza. Matan la inspiraciĂłn del pastor cuando le predica a una iglesia casi vacĂa, aniquilan la esperanza, alejan el celo, y originan un gran desánimo a toda la iglesia.
Por otro lado, cada asiento ocupado es un estĂmulo, es un incentivo y una inspiraciĂłn para el predicador y para toda persona que ama al Señor JesĂşs y que disfruta de la compañĂa de su familia espiritual; la cual es mas real y solidaria que su familia de sangre.
Y tú?... ¿También has perdido tu primer amor? Te mencionaré…
12 EVIDENCIAS CONCRETAS PARA QUE PUEDAS COMPROBARLO:
1. Cuando tu deleite en el Señor y en su Palabra, ya no es tan grande como tu deleite por otras personas, o por las cosas del mundo; evidentemente ya has perdido tu primer amor
2. Cuando tu alma ya no anhela la comuniĂłn Ăntima con el Señor, a travĂ©s de la oraciĂłn o de la lectura de su Palabra, ya has perdido tu primer amor
3. Cuando tus pensamientos, en tus momentos de ocio, no se dirigen al Señor, ya has perdido tu primer amor
4. Cuando te excusas fácilmente, o caes en cosas o diversiones, que sabes que no le agradan al Señor, es porque ya has perdido tu primer amor
5. Cuando ya te cuesta ofrendar con alegrĂa para la obra del Señor, y para las necesidades de otros, ya has perdido tu primer amor.
6. Cuando dejas de tratar a los hermanos cristianos como tratarĂas al Señor, ya has perdido tu primer amor
7. Cuando empiezas a ver los mandamientos del Señor como legalismo, o como restricciones para tu felicidad, ya has perdido tu primer amor
8. Cuando te preocupas más por quedar bien con la gente del mundo, en vez de buscar la aprobación del Señor, ya has perdido tu primer amor
9. Cuando dejas de predicar y dar a conocer al Señor por temor a ser rechazado, ya has perdido tu primer amor
10. Cuando te niegas a dejar de hacer algo que está ofendiendo a un hermano más débil, ya has perdido tu primer amor
11. Cuando te vuelves complaciente al pecado y a las tentaciones que te rodean, ya has perdido tu primer amor
12. Cuando no puedes perdonar a alguien que te ha ofendido, ya has perdido tu primer amor
¿PERO CÓMO PERDEMOS NUESTRO “PRIMER AMOR”?
¿Es a causa de no trabajar por el Señor?
No!...Podemos estar muy ocupados en la obra de Dios, y sin embargo no tener el gozo de nuestro primer amor. La iglesia de Efeso descrita en Apocalipsis, habĂa perdido su primer amor, y sin embargo, habĂa “trabajado arduamente” por amor de Su nombre.
· ¿Es entonces por causa de no leer la Biblia?
No!...Podemos conocer la Biblia y aĂşn asĂ perder nuestro primer amor. Los fariseos conocĂan bien las Escrituras. TambiĂ©n la Iglesia de Efeso. Incluso ellos usaron la Biblia para probar a los ApĂłstoles.
· ¿Es por causa de no orar?
No!...Podemos orar y todavĂa estar frĂos espiritualmente.
· ¿Es por causa de no predicar?
No!... Es posible predicar y tener el corazĂłn endurecido.
Conclusión: DEJAMOS NUESTRO “PRIMER AMOR” CUANDO PERDEMOS LA CONCIENCIA DE LA NECESIDAD QUE TENEMOS DEL SEÑOR A TODA HORA Y DIA TRAS DIA
“RECUERDA, POR TANTO, DE DONDE HAS CAÍDO, Y ARREPIÉNTETE, Y HAZ LAS PRIMERAS OBRAS; PUES SI NO, VENDRÉ PRONTO A TI, Y QUITARE TU CANDELERO DE SU LUGAR, SI NO TE HUBIERES ARREPENTIDO” – Apocalipsis 2:5
Recuperemos pues nuestro primer amor por el Señor, y por la iglesia.
Bendiciones y feliz Viernes!...🤗
“Habla de Dios y de la Biblia, porque el mundo necesita conocer al Señor; pero hazlo siempre con la pasión y la entrega del primer amor”
Por favor contribuye a que la vida en nuestra sociedad sea mejor, conociendo, viviendo y compartiendo esta reflexiĂłn que nos conecta con el evangelio.