El Arrepentimiento Es El Principio Del Cambio
🌟 📖“¿Quién se da cuenta de sus propios errores?… ¡Perdona, Señor, mis faltas ocultas! Quítale el orgullo a tu siervo; no permitas que el orgullo me domine. Así seré un hombre sin tacha; estaré libre de gran pecado.” Salmo 19:12 ss
Reflexión 🤔 El impedimento a vencer para agrada a Dios, y llevar una buena relación con Él y con todos los demás es nuestro orgullo.
David era consciente de que en tanto prevaleciera su orgullo, estaría viviendo en gran pecado.
Solo cuando luchamos contra el orgullo, podemos reconocer nuestros errores.
Porque quien no admite sus errores, no cambiará jamás sus malas actitudes.
Ilustración 📃 Un padre tardó veinte años en reconocer su error y lo hizo hasta el día que le notificaron sobre la detención de su hijo que conduciendo borracho, había provocado un fuerte accidente donde varias personas habían resultado heridas y el muchacho quedó también bastante golpeado, y en su aturdimiento, no sabía ni lo que había pasado.
Cuando el padre se dirigía a la estación de policía donde su hijo estaba detenido, inevitablemente fue recordando cuánto había descuidado la formación espiritual tanto de aquel hijo, como de todo el resto de su familia, incluyendo a su esposa. Volviendo atrás en sus recuerdos, como en una película, reflexionó que, aunque bien pudo haber estado más cerca de los problemas de aquel hijo, solo se entregó egoístamente a lo suyo. No supo reconocer la enorme necesidad que su hijo tenía de él, ni el daño que había generado con los malos tratos que dió a toda su familia.
Sin embargo en la propia delegación de policía, admitió su culpa cuando vio la gravedad del asunto, y sin importar cuántos curiosos estaban observando aquella escena, con lágrimas en los ojos le pidió perdón a su hijo que se encontraba muy lastimado tanto física como emocionalmente.
Por eso es bueno examinarnos y pedirle a Dios que traiga a la luz de nuestro entendimiento todo lo que tenemos que cambiar, y hacerlo antes de que estemos bajo gran presión, o incluso al final de nuestras vidas.
Hagámoslo a tiempo y con sinceridad, pidiendo siempre la ayuda de Dios para corregirnos.
Digámosle al Señor como le dijo David: “Ten compasión de mí, Dios mío, conforme a tu fiel amor; conforme a tu gran misericordia, borra mis rebeliones. Lava todas mis culpas y límpiame de mi pecado. Reconozco que he sido rebelde, siempre tengo presente mi pecado. Pequé contra ti y sólo contra ti, delante de ti hice lo que es malo; por eso tu sentencia es justa, y tu juicio es irreprochable.
Tú amas la verdad acerca de lo que se oculta y quieres que yo sea sabio en lo íntimo. Purifícame con hisopo de olor agradable y quedaré limpio; lávame y quedaré más blanco que la nieve.
Aparta tu vista de mis pecados y borra toda mi maldad. Dios mío, crea en mí un corazón limpio. Una vez más quiero ser fiel en mí espíritu.
Hazme sentir de nuevo la alegría de tu salvación; y que me sostenga tu Espíritu que me guía. Les enseñaré a los rebeldes tus caminos, y los pecadores se volverán a ti.”
(Salmos 51:1 ss)
Bendiciones y feliz Jueves! 🤗
“Habla de Dios y de la Biblia para ayudar a los demás a descubrir en ella, la perfecta voluntad de Dios para nuestras vidas”