Las Promesas de Dios
📖“Así pues, ustedes, que no son judíos, a quienes los judíos les llaman «los no circuncidados»(porque ellos circuncidan al hombre en el cuerpo, y a sí mismos se llaman «circuncidados»), recuerden que en otro tiempo ustedes estaban sin Cristo, separados de la nación de Israel, y no tenían parte en las alianzas ni en las promesas de Dios. Vivían en este mundo, sin Dios y sin esperanza.” Efesios 2:11-12 DHH
Reflexión 🤔 Las promesas que Dios le hizo a Israel, son también para nosotros los cristianos no-judíos? Así es! Entendámoslo: En la historia de la redención, Dios hizo varios pactos con su pueblo. Un pacto es una relación que involucra promesas confirmadas bajo juramento.
En Cristo, podemos ahora recibir las promesas de Dios. Recuerdas alguna promesa de la Biblia que haya inquietado tu corazón?. En Cristo, esa promesa es para ti.
📖“Después de esto, el Señor le habló a Abram (Ese fue el nombre original, y luego fue Abraham) en una visión y le dijo: —No tengas miedo, Abram, porque yo soy tu protector. Tu recompensa va a ser muy grande. Pero Abram le contestó: —Señor y Dios, ¿de qué me sirve que me des recompensa, si tú bien sabes que no tengo hijos? Como no me has dado ningún hijo, el heredero de todo lo que tengo va a ser Eliézer de Damasco, uno de mis criados.
El Señor le contestó: —Tu heredero va a ser tu propio hijo, y no un extraño.
Abram creyó al Señor, y por eso el Señor lo aceptó como justo.
—Pero, Señor y Dios, ¿cómo podré estar seguro de que voy a heredar esta tierra? —contestó Abram. Y Dios le dijo: —Tráeme una ternera, una cabra y un carnero, de tres años cada uno, y también una tórtola y un pichón de paloma. Abram trajo todos estos animales a Dios, los partió por la mitad y puso una mitad frente a otra; pero no partió las aves.
Entonces el Señor le dijo: —Debes saber que tus descendientes vivirán en un país extranjero, y que allí serán esclavos, y que serán maltratados durante cuatrocientos años. Pero yo también castigaré a la nación que va a hacerlos esclavos, y después tus descendientes saldrán libres y dueños de grandes riquezas. Por lo que a ti toca, morirás en paz cuando ya seas muy anciano, y así te reunirás con tus antepasados.
Aquel mismo día el Señor hizo una alianza con Abram y le dijo: —Esta tierra se la daré a tus descendientes, desde el río de Egipto hasta el río grande, el Éufrates.”
Génesis 15:1-4, 6, 8-10, 13-15, 18 DHH
Pensamiento erróneo: —“Mi relación con Dios no es tan importante como algunas de mis otras relaciones - mi matrimonio, mis hijos, mis amigos, etc.”
Pensamiento correcto: —“Estoy en una relación de pacto con Dios - Este tipo de relación es más profunda, y es la más importante que existe. En esta relación de pacto, Dios me ha hecho promesas en las que yo puedo confiar”.
Conclusión. “Cuando Dios hizo la promesa a Abraham, juró por sí mismo, porque no había otro superior a él por quien jurar; y dijo: «Sí, yo te bendeciré mucho y haré que tu descendencia sea numerosa.» Abraham esperó con paciencia, y recibió lo que Dios le había prometido. Cuando los hombres juran, lo hacen por alguien superior a ellos mismos; y cuando garantizan algo mediante un juramento, ya no hay más que discutir. Pues bien, Dios quiso mostrar claramente a quienes habían de recibir la herencia que él les prometía, que estaba dispuesto a cumplir la promesa sin cambiar nada de ella. Por eso garantizó su promesa mediante el juramento. De estas dos cosas que no pueden cambiarse y en las que Dios no puede mentir, recibimos un firme consuelo los que hemos buscado la protección de Dios y hemos confiado en la esperanza que él nos ha dado.“
Hebreos 6:13-18 DHHDK
Bendiciones y feliz Lunes! 🤗
“Habla de Dios y de la Biblia, para que tu fe cristiana tenga el más pleno sentido al comprender que todos los creyentes en Cristo, también somos descendientes de Abraham y herederos de las promesas del Señor”