Lástima o Compasión

🌟 📖 “Vivan en armonía los unos con los otros; compartan penas y alegrías, practiquen el amor fraternal, sean compasivos y humildes.”
‭‭1 Pedro‬ ‭3:8‬ ‭NVI‬‬

Reflexión🤔 La lástima es un sentimiento de pena o dolor que se experimenta por alguien que sufre.

Mientras que la compasión es la tristeza que se origina al ver sufrir a alguien y nos impulsa a ser solidarios para tratar de aliviar, remediar o evitar en algo su dolor.

En esta sociedad cada ves más endurecida, parece que nos queda sólo la lástima, pero se nos ha acabado la compasión. Son muchos los que lamentan el estado de las cosas, pero muy pocos los que hacen algo por mejorarlas. La lástima la tienen hasta los soberbios, los orgullosos, los tacaños y los de duro corazón; pero su egoísmo siempre los contiene para no ayudar a los demás de forma práctica y concreta. Son los que ven las necesidades de lejos, las reconocen, las comentan, pero no se involucran ni mueven un dedo ni contribuyen. Si platicas con alguien así, solo lo escucharás lamentar, pero nunca verás que haga algo para ayudar.

La compasión en cambio, nos exige poner de inmediato "Manos a la obra", para ayudar en algo concreto. La compasión busca hacer algo específico y palpable por los demás, ya sean algunas monedas, algo de abrigo, algo de comida, medicina, consuelo u oración.

Ilustración 📃Una mujer cruzó apresurada la calle, sin prestar atención a los vehículos que circulaban en ambas direcciones. El resultado fue que uno de ellos, por evitar golpearla, tuvo que hacer un brusco viraje, pero aún así le fue imposible evitar darle un fuerte golpe que la lesionó, para después colisionar contra otro vehículo estacionado. La situación se complicó por la falta de medios para auxiliar a aquella pobre mujer atropellada.
En seguida se arremolinó la gente, y comenzaron las palabras comunes de lástima diciendo: “Pobre mujer, qué feo estuvo eso!” varios tomaban fotos para compartirlas en el muro de sus redes sociales, pero ninguno ayudaba en nada, sino más bien solo estorbaban. Al fin, uno de los presentes ya molesto por tantas expresiones vacías e inútiles, le dijo a los demás:
"Amigos, la lástima no soluciona nada y esta mujer necesita ayuda. Aquí tengo yo cien pesos de compasión, si algún otro de ustedes puede, entonces ayudémosla de inmediato y de forma concreta!" Las palabras de aquel hombre calaron hondo en el ánimo de los espectadores, originando una colecta espontánea que resolvió la urgencia.

Y nosotros ¿Cuánta compasión tenemos al ver las necesidades particulares de los demás, o aún en sus enfermedades?

“Jesús dijo: —Un hombre iba de Jerusalén a Jericó. Unos ladrones lo rodearon, le quitaron la ropa, lo golpearon y lo dejaron medio muerto. Dio la casualidad que venía un sacerdote por el mismo camino. Cuando vio al hombre, siguió por otro lado. De la misma manera, un levita pasó por el mismo lugar, vio al hombre, pero también siguió por otro lado. Pero un samaritano que viajaba por ahí llegó a donde estaba el hombre, y al verlo se compadeció de él. Entonces se acercó al hombre, derramó aceite y vino en las heridas y las vendó. Luego lo montó en su animal de carga y lo llevó a una pequeña posada donde lo cuidó.” Lucas‬ ‭10:30 ss PDT‬‬

Cuál de esos personajes nos representa mejor?… Si no es el Samaritano, entonces debemos orar y hacer algunos ajustes en nuestro corazón para mejorar nuestra generosidad.

Bendiciones y feliz Sábado! 🤗

“Habla de Dios y de la Biblia, porque es el único libro que reboza de sabiduría práctica para edificar al creyente y confrontar al que aún no lo es. Además de que enseña que una fe sin obras, es una fe muerta que no salva”

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