Reconciliación Entre Hermanos

📖“Cuando Jacob alzó la vista y vio que Esaú su hermano se acercaba con cuatrocientos hombres, repartió a los niños entre Lea, Raquel y las dos esclavas. Al frente de todos colocó a las criadas con sus hijos, luego a Lea con sus hijos, y por último a Raquel con José. Jacob, por su parte, se adelantó a ellos, inclinándose hasta el suelo siete veces mientras se iba acercando a su hermano. Pero Esaú corrió a su encuentro y, echándole los brazos al cuello, lo abrazó y lo besó. Entonces los dos se pusieron a llorar. Luego Esaú alzó la vista y, al ver a las mujeres y a los niños, preguntó: —¿Quiénes son estos que te acompañan? —Son los hijos que Dios le ha concedido a tu siervo —respondió Jacob. Las esclavas y sus hijos se acercaron y se inclinaron ante Esaú. Luego, Lea y sus hijos hicieron lo mismo y, por último, también se inclinaron José y Raquel. —¿Qué significan todas estas manadas que han salido a mi encuentro? —preguntó Esaú. —Intentaba con ellas ganarme tu confianza —contestó Jacob. —Hermano mío —repuso Esaú—, ya tengo más que suficiente. Quédate con lo que te pertenece. —No, por favor —insistió Jacob—; si me he ganado tu confianza, acepta este presente que te ofrezco. Ya que me has recibido tan bien, ¡ver tu rostro es como ver a Dios mismo! Acéptame el regalo que te he traído. Dios ha sido muy bueno conmigo, y tengo más de lo que necesito. Fue tanta la insistencia de Jacob que, finalmente, Esaú aceptó.”
‭‭Génesis‬ ‭33:1-11‬ ‭

Reflexión 🤔 Son frecuentes las diferencias entre hermanos, y tienen su explicación, ya que cada uno cuenta con un carácter diferente que se
formó con su visión de la vida y su muy personal actitud y respuesta a cada reto o circunstancia que fue enfrentando, pero la mayor y mejor influencia, es el nivel de temor de Dios que cada uno tenga, porque de eso dependerá una vida de verdadera bendición de acuerdo al criterio bíblico.

Ilustración 📃 Tim y su hermano eran bastante competitivos, y desde niños peleaban. Su papá lo entendía muy bien porque también él tenía hermanos. Pero su ¿mamá?…Ella no tanto.

La historia de estos chicos podría encajar en Génesis, con el subtítulo de: “Breve historia sobre rivalidad entre hermanos”, entre las de Caín y Abel (Génesis 4); Isaac e Ismael (21:8-10); José y todos los hermanos, excepto Benjamín (cap. 37). Pero, en cuanto a pelearse entre hermanos, es difícil superar a Jacob y Esaú.

El mellizo de Esaú, Jacob, lo había engañado dos veces; por eso, Esaú quería matarlo (27:41). Décadas después, se reconciliaron (cap. 33), pero la rivalidad siguió entre sus descendientes: las naciones de Edom e Israel. Cuando los israelitas iban a entrar en la tierra prometida, Edom los amenazó con un ejército (Números 20:14-21). Años después, los edomitas asesinaron a refugiados de Jerusalén (Abdías 10-14).

Felizmente, la Biblia no solo contiene relatos tristes, sino sobretodo la historia de la redención en Cristo. Él cambió todo al decir a sus discípulos: «Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros» (Juan 13:34). Y luego, al morir por nosotros, demostró lo que eso significaba.

Tim y su hermano se volvieron cercanos con los años, y lo mismo nos sucede con Dios. Su gracia puede convertir la rivalidad entre hermanos en un amor fraternal.

Conclusión: La rivalidad entre hermanos es natural, pero el amor de Dios es sobrenatural. El apremio de Jesús a que los hermanos se reconcilien, quedó enfáticamente ordenado en el evangelio, cuando dijo: “»Si al llevar tu ofrenda al altar, te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí mismo delante del altar y ve primero a ponerte en paz con tu hermano. Entonces podrás volver al altar y presentar tu ofrenda.”
‭‭San Mateo‬ ‭5‬:‭23‬-‭24‬

Oración: “Señor, restaura nuestras relaciones de hermanos mediante tu gran amor, y guíanos con tu Espíritu, hasta que nuestro trato sea ante los demás, un verdadero testimonio de fraternidad, en el nombre de Jesús, amén!”

Bendiciones y feliz Domingo!…🤗

“Habla de Dios y de la Biblia, porque en ella encontrarás que aún los hermanos de Jesús al principio no creían en Él. Busquemos entonces, la reconciliación y un acercamiento más genuino y amoroso con cada uno de nuestros hermanos de sangre mientras todavía podamos hacerlo, porque la muerte nos separará para siempre de ellos.”

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