Sin Discriminación
🌟 Hechos 10:28
📖“Pedro les dijo: —Ustedes saben que a un judío le prohíbe su religión tener tratos con extranjeros o entrar en sus casas. Pero Dios me ha enseñado que no debo llamar profano o impuro a nadie.”
Reflexión 🤔 Algo no superado en algunos lugares del mundo son los prejuicios raciales.
Se necesita tener poco entendimiento y mucha soberbia, para creerse superior a los demás por el solo color de piel, nacionalidad o nivel social. Baste mirar el caso de George Floyd, una persona de color, que fue asfixiado en EEUU por policías blancos y que derivó en disturbios, vandalismo y saqueo de autoservicios.
Nada nos extrañe, porque qué es el hombre cuando Dios no está en su corazón?..solo poco más que una bestia, o tal vez menos?…y lo comprobamos cuando miramos su conducta inhumana y su increíble crueldad. Sin duda alguna, el espíritu que movió a Hitler al extremo de llevar a los judíos a los hornos crematorios, es el mismo que ahora mueve a los cárteles para torturar, asesinar y desmembrar a sus enemigos.
Hitler creía que los alemanes pertenecían a un grupo superior de razas al que llamaban “ario”. Él afirmaba que la raza “aria” alemana, había sido mejor dotada que las demás, y que esa superioridad biológica los destinaba a estar al mando de un vasto imperio en Europa Oriental y por tanto debían ser ellos los que se impusieran sobre todos los demás. Quisieron exterminar al pueblo Judío y casi lo consiguen al matar a más de seis millones de ellos.
De igual manera, en la actualidad, Klaus Schwab y los pocos que componen su Foro Económico Mundial, buscan controlar a toda la humanidad a través de su nanotecnología trans humanista, alterando el ADN, para controlar hasta los pensamientos de
cada persona. No cabe duda de que este nuevo Hitler, ha superado al original.
La discriminación no debería tener cabida en estos tiempos donde se presume de tanto avance del ser humano.
Sin embargo, también entre los cristianos carnales, se han dado, y todavía se dan algunos rasgos discriminatorios.
Ilustración 📃 Aunque estuvo a punto de convertirse al cristianismo, Gandhi permaneció hindú hasta el final. Adoraba a Cristo como una de las encarnaciones de Dios, no como la única. Y nunca dio el paso final para hacerse cristiano. En una autobiografía que se publicó en la India, él dice que en sus días de estudiante se impresionó mucho al leer los evangelios, y que pensó seriamente en bautizarse y ser miembro de una iglesia cristiana. Pensaba acertadamente que en el cristianismo estaba la solución a los prejuicios raciales y a las diferencias de casta que afectan a la India y al Africa del Sur. Un domingo por la mañana, Gandhi fue a una iglesia cristiana que estaba cerca, con el propósito de hablar con el ministro al terminar el culto. Cuando entró en el templo, la comisión de recepción se negó a proporcionarle un asiento, y le sugirió que fuera a una iglesia de negros. Gandhi salió de aquel templo para no volver más, pues pensó: “Si también los cristianos tienen diferencias de clase”, entonces permaneceré siendo hindú, y desde allí atacaré el mal.”
Y qué decir de los musulmanes que consideran “infieles” a los que no creen lo que ellos creen y han también asesinado a miles?.
La discriminación racial y religiosa es todavía un lastre que ya no debe existir, pues Dios, “De un solo hombre creó todas las naciones de la tierra. De antemano decidió cuándo se levantarían y cuándo caerían, y determinó los límites de cada una. »Su propósito era que las naciones buscaran a Dios y, quizá acercándose a tientas, lo encontraran; aunque él no está lejos de ninguno de nosotros.”
(Hechos 17:26-27)
Entendamos de una vez que todos somos hermanos, pues acaso “»¿No tenemos todos un mismo padre? ¿No nos ha creado un mismo Dios? ¿Por qué nos portamos deslealmente unos contra otros, profanando el pacto de nuestros padres?”
(Malaquías 2:10)
En Cristo “Ya no importa el ser judío o griego, esclavo o libre, hombre o mujer; porque unidos a Cristo Jesús, todos ustedes son uno solo. Y si son de Cristo, entonces son descendientes de Abraham y herederos de las promesas que Dios le hizo.”
(Gálatas 3:28-29)
Conclusión: Desechemos el complejo de superioridad. Pablo dijo: “Les pido que ninguno se crea mejor que los demás. Más bien, usen su buen juicio para formarse una opinión realista de sí mismos conforme a la porción de fe que Dios le ha dado a cada uno. Nosotros, somos muchos, pero todos formamos un solo cuerpo en nuestra relación con Cristo. Como parte de ese cuerpo, cada uno pertenece a los demás. Pero Dios en su generoso amor le ha dado a cada uno dones diferentes.”
(Romanos 12:3 ss)
Cuál es el tuyo?..hazlo brillar intensamente para que le sea útil a los otros. Y no olvidemos jamás, lo que dijo Jesús a sus discípulos que buscaban ser más importantes que los demás. “Cuando los otros diez discípulos oyeron esto, se enojaron con Santiago y Juan. Pero Jesús los llamó, y les dijo: —Como ustedes saben, entre los paganos hay jefes que se creen con derecho a gobernar con tiranía a sus súbditos, y los grandes hacen sentir su autoridad sobre ellos. Pero entre ustedes no debe ser así. Al contrario, el que quiera ser grande entre ustedes, deberá servir a los demás, y el que entre ustedes quiera ser el primero, deberá ser el esclavo de los demás. Porque ni aun el Hijo del hombre vino para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por una multitud.”
(San Marcos 10:41-45 DHH94PC)
Bendiciones y feliz Miércoles! 🤗
“Habla de Dios y de la Biblia, y ayuda a los demás a usar sus talentos para beneficio del cuerpo de Cristo, el cual es la iglesia”