Tipos de Personas
📖"El hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente" (I Cor. 2:14).
"En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie" (I Cor. 2:15).
"De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo" (I Cor. 3:1).
Reflexión 🤔 "Los cristianos carnales son la carga más pesada en una iglesia." Pablo divide al hombre en tres categorías, y estas categorías definen la forma en que todo hombre será juzgado, sin importar si pertenece o no a alguna organización religiosa, y nuestro destino eterno depende de la categoría en la cual nos encontramos.
Examinemos en más detalle estas tres categorías: el hombre natural, el hombre carnal, y el hombre espiritual.
1.-El Hombre Natural es incrédulo.
La biblia dice que:
"El hombre natural, no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente."
El hombre natural vive de acuerdo con lo natural. Su intelecto y sus emociones lo gobiernan siempre, y en su condición, el cree que todo lo que piensa es lo más destacado y excepcional. Ese tipo de personas no han nacido de nuevo, y son inconversos porque se empeñan en juzgar lo espiritual y lo divino con su pobre lógica humana.
El hombre natural no está despierto a las cosas espirituales, y no puede entender lo espiritual porque no le parece racional. La palabra de Dios, sus promesas, sus profecías, su gracia y la fe que ella exige, son cosas incomprensibles para el hombre natural. El mundo de esa clase de hombres naturales, es limitado por su entendimiento finito y sus sentimientos. El hombre natural no puede entrar en el reino de Dios, porque ahí no hay lugar para lo racional. Jesús dijo, "De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios" (Juan 3:3)
2.-El Hombre creyente carnal.
De estos, Pablo dice.."Yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo."
Por todo el Nuevo Testamento hay ejemplos de la diferencia entre el hombre carnal y el hombre espiritual. Estos dos tipos de hombres son extremamente diferentes, pero tienen una cosa en común, que los dos son nacidos del Espíritu. La frase "cristiano carnal", fue usada por primera vez en I Corintios 3:1 cuando Pablo habla a los cristianos en Corinto les dijo, "…no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo."
Lo primero que aprendemos de este pasaje es que el cristiano carnal es como un niño, que aunque es uno que ha nacido de Dios, aún vive fuera del reino de Dios. No crece espiritualmente, no madura, y no se puede cuidar solo. El problema es que el cristiano carnal, ya debería de haber superado esa etapa de su vida espiritual, pero no anhela su crecimiento. Es como un niño de diez años que todavía no puede escribir ni leer, y que aunque bien sabe que aprender le beneficia, no quiere hacerlo. Ciertamente los que somos maduros en la fe, debemos preocuparnos por los “niños” cristianos que todavía son carnales.
Porque cuando nacemos, todos somos carnales, y cuando nacemos de nuevo (espiritualmente), esta carnalidad aún persiste. El problema con los cristianos de Corinto, fue que después de varios años, todavía seguían siendo muy carnales. Pablo estuvo obligado a corregirlos y les dijo: "Manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios" (Gálatas 5:19-21).
De manera que la carnalidad del hombre, no es removida por medio de la conversión, debe ser superada por medio de la obra de santificación que realiza el Espíritu Santo en cada creyente que entrega su vida a Cristo y que lo reconoce como su único y verdadero Señor y Salvador. Por esto Pablo dice que “la voluntad de Dios es vuestra santificación" (I Tes 4:3).
A pesar de todos los frutos del espíritu que poseían, los cristianos corintios no habían sido santificados. La causa de todos los problemas en esa iglesia, fue la carnalidad, y la libertad de la carnalidad viene solo por medio del sacrificio de cristo en la cruz. La experiencia de la conversión ocurre instantáneamente, pero la santificación es un proceso continuo que durará toda la vida “buscando alcanzar la estatura del Varón perfecto, el cual es Cristo”. Debemos procurar ser obedientes y negarnos a nosotros mismos diariamente, para ser verdaderos seguidores de Jesús.
3.-El Hombre Espiritual.
"En cambio el espiritual, juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie."
El hombre espiritual crucifica continuamente los deseos de su carne. La carnalidad nunca perseguirá a Jesús, y cuando nos negamos a nuestros deseos carnales, avanzamos en alcanzar la mente de Cristo.
Las características dominantes del hombre espiritual, son que:
a) El ya entiende claramente los deseos de Cristo.
b) El ya manifiesta los frutos del Espíritu.
c) El ya vive bajo la dirección del Espíritu Santo que opera en el.
🔸Los Deseos de Cristo. El cristiano carnal pone su enfoque en la experiencia de su conversión, pero el cristiano espiritual, es consumido por Cristo mismo. El hombre espiritual ya ha sido transformado y piensa como Cristo piensa. Actúa y reacciona de una forma agradable al Señor. Todo lo que hace es originado por sus deseo de agradar a Cristo.
🔹Los Frutos del Espíritu. "Mas el fruto del espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, y templanza" (Gal 5:22). Es importante distinguir entre los frutos del Espíritu y las obras del Espíritu. Las obras del Espíritu son para la edificación de la iglesia, pero los frutos del Espíritu son el resultado de la morada del Espíritu dentro de nosotros.
🔸La Dirección del Espíritu. "Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, estos son hijos de Dios" (Rom 8:14). El hombre espiritual es dirigido por el Espíritu. El aprender a seguir al Espíritu, es también un proceso. Mientras aprendemos a seguir a Jesús, aprendemos también a sentir la dirección del Espíritu Santo guiando nuestras vidas.
Jesús dijo, "Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen" (Juan 10:27). Para seguir a Jesús, necesitamos escuchar su Palabra, pero no podemos escuchar si no hemos crucificado nuestra vida carnal.
Conclusión. “Por lo tanto, despójense de toda clase de maldad, todo engaño, hipocresía y envidia, y toda clase de chismes. Como niños recién nacidos, busquen con ansia la leche espiritual pura, (en la Biblia), para que por medio de ella crezcan y tengan salvación,” 1 Pedro 2:1-2
Así que no solo creas en Jesús, “anhela ser una ofrenda viva, santa y agradable para Él”.
Bendiciones y feliz Martes!…🤗
“Habla de Dios y de la Biblia, y avanza en el conocimiento de su Palabra, para crecer y llegar a la estatura del varón perfecto”