Instrucciones Completas
🌟 San Mateo 28:18 ss
📖 “Jesús se acercó a ellos y les dijo: —Dios me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Vayan, pues, a las gentes de todas las naciones, y háganlas mis discípulos; bautícenlas en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enséñenles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Por mi parte, yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo.”
Reflexión 🤔 Cualquier parte que leamos de la Biblia nos puede atrapar de manera interesante, y nos hará buscar el final de ese relato, lo que por consecuencia consideraremos aplicar a nuestra vida. Cada versículo nos confronta, y nos examina para ver si resultamos aprobados o reprobados al respecto. Y es que “La Escritura entera es inspirada por Dios y es útil para enseñarnos, para reprendernos, para corregirnos y para indicarnos cómo llevar una vida justa.”
(2 Timoteo 3:16)
Es por eso que al terminar una buena predicación, se concluye con una exhortación a vivir conforme a lo que acabamos de escuchar. Es una invitación a rendir la vida a Cristo, aceptándolo como nuestro Salvador y Señor, a fin de que Él guíe nuestras vidas para empezar a andar por sus caminos fortalecidos con su gracia. No se debe terminar una predicación sin decirle a quienes nos escuchan lo que Dios espera que hagan.
Ilustración 📃 Un rico hombre de negocios, visitó la iglesia de una gran ciudad, y después del sermón felicitó al ministro por el buen culto y su predicación. “Pero”, dijo el empresario, “si usted fuera mi agente de ventas, yo lo despediría de inmediato; porque usted atrajo mi atención con su manera de presentarse, con su voz y con sus modales. Su oración, su lectura de la Biblia, y su discurso lógico, me despertaron el interés. Usted calentó mi corazón con un deseo de obtener lo que usted estaba predicando, pero en seguida se detuvo sin pedirme que hiciera algo específico para conseguir lo que usted promovía, y al final, aunque todo me cautivó, no supe qué hacer, porque usted no me lo dijo.
En mis negocios lo importante es conseguir que la persona firme en la línea de puntos que aparece abajo al final de cada uno de mis contratos.”
Después de escuchar a aquel empresario, y de reconocer el pastor, que ciertamente él nunca había exhortado a sus fieles a rendirse a Cristo, para aceptarlo como verdadero Salvador y obedecerlo, desde aquel día cambió para siempre, finalizando cada predicación con una poderosa y hermosa consagración de todos los asistentes de su iglesia, al Señorío de Jesús. Y es que aquel empresario le había enseñado al pastor una parte importante de la administración, y la aplicó muy exitosamente en la obra del evangelio.
Juan el Bautista atrajo la atención por su presentación y su manera de predicar, y los corazones se conmovieron con su mensaje; pero como culminación de todo lo que les anunciaba, Juan persuadía a las gentes a que dieran frutos dignos de arrepentimiento y se sometieran al bautismo, como una demostración de su propósito y verdadera determinación de abandonar sus pecados para vivir una vida nueva.
También Ananías ministró a Saulo de Tarso de manera completa hasta su bautizo diciéndole..“El Dios de nuestros antepasados te ha escogido para que conozcas sus planes, y veas al Justo y oigas las palabras de su boca. Tú serás su testigo ante todo el mundo de lo que has visto y oído. No hay tiempo que perder. Levántate, bautízate, y lávate de tus pecados invocando su nombre”.
(Hechos 22:14-16)
Otro pasaje narra que el primer sermón de Pedro, fue tan completo y poderoso, que se convirtieron unas 3,000 personas, porque “Con muchas palabras, Pedro les exhortaba y les decía: ―¡Apártense de esta gente perversa! Los que creyeron sus palabras, unos tres mil en total, se bautizaron y se unieron a los demás creyentes”
(Hechos 2:40-41)
Conclusión: Si al predicador se le olvidara hacerte un llamado a una completa conversión, aún así escucha la voz del Espíritu Santo que te habla en la Biblia y acepta que Jesús sea tu Salvador, díselo claramente y en cuanto puedas bautízate.
Bendiciones y feliz Viernes! 🤗
“Habla de Dios y de la biblia. Pero no sólo anuncies un versículo aislado; sino dales las instrucciones completas, las cuales son: Oír el evangelio, aceptarlo en el corazón, rendirse a Cristo, convertirse dejando el pecado y demostrarle a todos que ya se es alguien diferente. Sólo eso es nacer de nuevo”