Dios Pagará

📖 “Queridos hermanos, no tomen venganza ustedes mismos, sino dejen que Dios sea quien castigue; porque la Escritura dice: «A mí me corresponde hacer justicia; yo pagaré, dice el Señor.» Y también: «Si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; y si tiene sed, dale de beber; así harás que le arda la cara de vergüenza.» No te dejes vencer por el mal. Al contrario, vence con el bien el mal.”
‭‭Romanos‬ ‭12:19-21‬ ‭DHHDK‬‬

Reflexión 🤔 Todos hemos sido agraviados de una manera o de otra. La mayoría, probablemente, hemos sido ofendidos seriamente por alguien que nunca nos pidió perdón ni hizo nada para rectificarlo. Y qué vamos a hacer con eso?

Uno de los obstáculos más profundos para dejar ir el dolor y la amargura, es la convicción de que se nos debe hacer justicia, porque cuando no se castiga, la gente puede salirse con la suya.
Ese razonamiento es uno de los obstáculos para poder perdonar y soltar nuestros rencores. Pero cuando no otorgamos perdón, (aunque no nos lo pidan), entonces caemos en nuestro propio pecado, con el cual habremos de lidiar en amargura y resentimientos. Nos negamos a perdonar porque sentimos que simplemente dejarlo ir, sería admitir que no se nos haga justicia.
Así que acumulamos más ira y recordamos la ofensa una y otra vez, enfermando más nuestras emociones y sentimientos, mientras cavilamos pensando que lo que nos hicieron “No debería haber pasado así; porque aquello estuvo mal; estuvo muy mal. ¿Cómo puede ser él tan feliz ahora, mientras yo me siento tan miserable?…Eso que me hizo estuvo tan mal, estuvo muy mal!”…

Para ayudarnos a resolver eso, en Romanos 12:19 Dios nos da estas palabras para quitarnos la carga:
"Nunca se venguen ustedes mismos, sino dejen que Dios haga justicia."… ¿Qué significa esto para ti?..
Si dejas ir la carga de tu ira, si sueltas tu dolor de haber sido agraviado, no significa que no fuiste agraviado en gran manera.
Ni tampoco significa que no habrá justicia, ni que ellos se saldrán con la suya. No!… de ninguna manera!
Solo significa, que cuando dejas ir la carga de la venganza, Dios la tomará y tú quedarás libre de sus devastadores efectos.
Solo esta es la correcta manera de dar la venganza al único que le pertenece y que la puede ejecutar.

Conclusión. Dejar que del Señor sea la venganza, no es desear que Él castigue duramente a nuestro ofensor y hasta lo envíe al infierno; sino que sabemos que por fin quedamos libres para amar como Dios nos lo enseña, que es renunciar a la venganza, para perdonar y amar a quienes en ocasiones nos tratan como enemigos.

Bendiciones y feliz Sábado!…🤗

“Habla de Dios y de la Biblia, y déjate fortalecer y trasformar por el poder del Espíritu Santo, que es quien sostiene la vida del creyente, para que pueda soportarlo todo y permanezca fuerte, firme, y en victoria”

Anterior
Anterior

Cuál es tu Precio?

Siguiente
Siguiente

Asunto Arreglado